6/6/10

La Vida después de la Muerte

  Hasta el momento, el fenómeno de la muerte es de difícil definición. Por algo el filósofo español Jorge Santayana (1863-1952) decía que "una buena manera de probar el calibre de una filosofía es preguntar lo que piensa acerca de la muerte."
  De esa manera, en el curso de la historia han surgido distintas ideas acerca de la muerte. Así, podemos encontrar una idea de la muerte en el naturalismo, en el platonismo, en el budismo, etc. También es distinta la idea de la muerte en las distintas culturas, en los distintos períodos históricos y en los distintos lugares que configuran una mentalidad colectiva.
  Así como hay ideas acerca de la muerte, en la misma forma encontramos distintas ideas sobre el destino del hombre después de la muerte. Éstas se expresan esencialmente en las diferentes religiones, mediante "fórmulas consoladoras" que prometen la inmortalidad en el más allá.
  La teoría de la reencarnación, por ejemplo, considera que al sobrevenir la muerte el alma del hombre emigra a otro cuerpo, esto es, reencarna. La serie de transmigraciones y reencarnaciones constituye a su vez una recompensa o un castigo; cuando hay castigo, las almas emigran a cuerpos inferiores; cuando hay recompensa, a los cuerpos superiores, hasta quedar, finalmente, incorporados a un astro.
  El budismo dice que las almas de los hombres pueden transmigrar, pero toda transmigración constituye un castigo. Para evitarlo hay que llevar una vida pura, única forma de superar la pesadilla de los continuos renacimientos. Siendo así, la existencia se sumerge en el nirvana, estado de serenidad inefable que se caracteriza por la cesación del sufrimiento y de la miseria.
  El Catolicismo asegura que hay sobrevivencia individual de almas, acompañada luego por la resurrección de los cuerpos. Al respecto, el converso Pablo de Tarso, atalayando el suceso conmovedor del Juicio Final escribió: "porque sonará la trompeta, y los muertos resucitarán incorruptibles."
  También existe una concepción naturalista que niega toda inmortalidad. Esa concepción dice que no hay sobrevivencia de ninguna especie. La vida del hombre se reduce a su cuerpo, y al sobrevenir la muerte, tiene lugar la completa disolución de la existencia humana.
  Pero esa disolución, en el pensamiento de Compay Segundo, tiene una connotación de eternidad: "Nosotros no morimos; nos transformamos. De nuestro cuerpo salen gusanitos que después, convertidos en mariposas, emprenden vuelo.Por eso digo a los niños que no cacen ni maten a las mariposas. Pudiera tratarse de un gran artista o de un gran poeta. Y en mi canción Clarabella concluyo diciendo 'Yo nunca pienso que me tengo que morir.'"
  Existen más concepciones sobre la muerte y sobre lo que viene después. Pero, independientemente de la idea que se te tenga, el hombre debe reflexionar sobre la fugacidad de su tránsito por la vida, y meditar sobre su destino.
  En ese sentido, la muerte y sus símbolos son en Masonería la preparación y la puerta de una mejor comprensión de la vida. No hay duda de que, reflexionando de esa manera, el hombre puede sacar conclusiones provechosas, que contribuirán poderosamente a modificar su fanatismo y sus pasiones.
  No olvidemos que la vida, bien lo decía Job, "es como una flor que se abre y luego se marchita." Pero en ese tránsito efímero se pueden hacer cosas buenas. La tarea del hombre en su paso por la Tierra debe ser constructiva.
  El hombre ha de dejar algún fruto, o muchos frutos, para que el día de su muerte la sociedad pueda sopesar escrupulosamente su obra, y si es buena, el juicio de la historia le condecerá la inmortalidad.
 
 

3 comentarios:

Peperina dijo...

La muerte es una vida vivida. La vida es una muerte que viene.J.L Borges.L
y vos juan, En cual de las teorías crees??
yo creo en esto..
La muerte es algo que no debemos temer ni pensar porque, mientras somos, la muerte no es y cuando la muerte es, nosotros no somos.

Juani dijo...

Yo no defiendo a ninguna teoría en particular porque son eso, teorías, no hay una verdad absoluta que pueda comprobarse; "nadie vuelve para contarlo", como se suele decir.
Yo creo, o quiero creer, que hay algo más allá de la muerte; algo por conocer, que se hace esperar durante toda la vida.
Mientras tanto,el último párrafo resume lo indudablemente cierto: podemos volvernos inmortales por tan sólo nuestras acciones; quedar en la memoria de alguien es en cierto modo no morir jamás.

Peperina ☼ dijo...

de eso creo que se trata la vida, creo que cada uno debe hacerse inmortal, trascender a la muerte y ya sea para todo un país, para un pueblo o solo para unos pocos inmortalizarse en las acciones y pensamientos y así habrá algo más allá de la muerte, no?

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